Las zonas más comunes a tratar
La rigidez interna es una de las amenazas más comunes y peligrosas para el cuerpo
La rigidez aumenta con la edad y el estilo de vida. Los órganos y los reflejos se ven afectados por esta rigidez interior. También lo hace el sistema de circulación sanguínea y venosa del cuerpo. Esto forma parte de un proceso natural en el que el cuerpo se prepara para envejecer y morir. Afortunadamente, es posible ralentizar este proceso.
Cuando acude a mí para un tratamiento, trabajo con su sistema nervioso y muscular inconsciente. Rápidamente me gano la confianza del "conductor" que se encuentra en su cabeza y controla todo el sistema. El "conductor" se da cuenta rápidamente de que tengo muchos conocimientos y de que me gustaría ayudarle.
Los dolores más comunes pueden ser los más difíciles de entender
Pero afortunadamente tengo una buena experiencia en ayudar a la gente con estos problemas. Aquí están algunos de ellos:
Algunos sufren de presión bajo los pies, que se propaga a la cadera y la espalda. Aquí tengo muy buenos ejercicios y entrenamiento de coordinación para toda la parte inferior del cuerpo, que consigue que los pies rígidos, las caderas y la espalda vuelvan a estar en su sitio.
Las disfunciones funcionales en los tobillos y las rodillas, y alrededor de ellos, acaban provocando grandes dolores en los músculos pequeños y en los anejos. Especialmente cuando los músculos se van a utilizar durante mucho tiempo, el ácido láctico se acumula fácilmente y causa dolor.
Mala respiración y dolor en el pecho, rigidez de caderas y dolor muscular en los glúteos, calambres en las piernas, dolor en los hombros y brazos, dolor facial y dolores de cabeza.
Encontrar el daño inicial es concluyente para encontrar el mejor tratamiento posible. Un tratamiento que facilite la mejora y el restablecimiento total del cuerpo.